31 de julio de 2008

Pinganillo 'fashion world'

Qué dificil es poner los títulos oye. El del presente escrito intenta describir en tres palabras uno de los hechos que más me ha dejado atónito desde mi llegada país de la libertad. Atónito según la Real Academia Española significa pasmado o espantado de un objeto o suceso raro, lo que describe perfectamente mis sensaciones. Aunque he de añadir además 'hilarius', que viene de hilarante (que inspira risa o alegría), ya que la palabra "hilarado" no existe en castellano.

Todo este despliegue de conocimentos lingüísticos viene a cuento de que, aparte del título, también es difícil hacer una introducción, así que he dejado que el diccionario hablara por mí. Pero ahora dejaré que lo haga una imagen, ya que lo que he estado experimentando (aún sigo haciéndolo) ocurre justo cuando veo... !Esto!

Puede parecer un objeto chulo o molón, según los ojos de quien mire podría ser incluso soso y rozando lo insulso. Pero, ohhhhhhhh, todo cambia cuando lo ves instalado en... las orejas de la gente. Porque esta muestra de innovación es un manos libres que se cuelga del pabellón auditivo, igual que los auriculares para escuchar música, lo que aquí llaman 'headset' y allí le decimos "manoslibrespalaoreja".

Para su promoción utilizan anuncios en los que salen hombres y mujeres en edad de merecer, elegantes y de buen ver utilizando el aparatito en cuestión. Suelen ser los más altos de la gama, vistosos y de pequeño tamaño (los manos-libres y los modelos que posan también). Un buen ejemplo puede ser...



Así se da una imagen de producto 'cool' y elegante y que, al igual que tener un buen coche, un buen gps, un buen móvil, una buena computadora o ropa de marca, elevará tu estatus social a un estrato superior. Con el valor añadido de que funciona con tecnología 'bluetooth'.

Puedes ver a gente conduciendo y trabajando con su pinganillo. Hasta aquí todo correcto, personas con las manos ocupadas que necesitan de la comunicación en ese preciso instante. Pero lo "atonizante" es que, amig@s, inverosímilmente la campaña de 'marketing' funciona. Existen seres humanos que se compran el cachivache y puedes verles fundidos en un sólo y féliz ente con la nave estelar 'Enterprise' de Star Trek mientras pasean, van de compras, esperan cola para el cine o cenan con otr@s tip@s, y con las manos completamente desocupadas. La imagen de la vida real sería algo más parecido a...

Sólo hay que cambiar al chico guapo por un tío gordo y lo tenéis delante. Y tal como se vé hay algunos modelos que incluso lucen, así pueden ver que eres un usuario sofisticado desde la distancia.

Una única explicación posible para este fenómeno, que es bastante habitual por aquí. Hay gente que cree que llevar esto colgado de la oreja mola, es moderno y signo de distinción. Y para denominarlos utilizaré el término 'redneck', una palabra nueva que he aprendido y que me ha gustado. Es la expresión local que viene a ser equiparable a nuestro paleto de pueblo, que de tanto trabajar la tierra al sol se les ha quedado el cuello rojo.

Y como el tema ha girado de nuevo hacia la semántica doy por finalizado el ciclo y no encuentro mejor momento para despedirme. Hasta la próxima.

Muir Woods

Ya me queda ná pal regreso así que voy a aprovechar para escribiros las últimas historias empezando por la del pasado viernes.

Me llamó Barb y me invitó a ir con ella y su sobrina a Muir Woods, yo no sabía lo que era pero con tal de salir de casa y hacer vida social me apunto a un bombardeo. Buena elección.

Primero estuvimos a las afueras de San Francisco contemplando unas preciosas vistas desde la ladera de una montaña. La última vez que estuve por allí había mucha niebla pero en ese momento el sol radiaba desde el cielo con todo su esplendor. Y como el tiempo lo permitía eché unas fotos del Golden Gate de lejos. Luego ya nos fuimos al lío.

Muir Woods, como su propio nombre indica, es un bosque. Pero no un bosque cualquiera, al menos para mí, porque nunca antes había estado en un bosque de secuoyas. Además lo tienen catalogado como reserva natural así que se encuentra en perfecto estado de conservación. Y como ayuda extra tienes que pagar 5 'bucks' por entrar, cosa que me parece una gran idea si la pasta se dedica a mantenerlo.

¿Por donde empezar? Por el silencio. Y será por la cultura pero no me hago yo a estar al aire libre y que la gente no haga ruido, es como si estuviéramos en una iglesia natural. Echo de menos el jolgorio y el alboroto, snif... Aunque la ausencia de escándalo hace la visita diferente, como más mística.

No estoy seguro de si lo sabíais pero las secuoyas son los árboles más grandes del mundo y creo que también los que más viven. Llegan a medir unos 100 metros de alto y la secuoya gigante más vetusta se estima que tiene unos 2.500 años de edad, el General Sherman. ¿Os habéis parado un momento a pensar lo que esto significa? Pues que ha vivido el nacimiento, muerte y resurrección de Cristo, auge y decadencia de imperios varios, el descubrimento e invasión de América, las dos guerras mundiales más todas las modernas y ha estado de pie durante la vida de todos los ancestros que vuestras familias puedan recordar. ¿Qué fuerte no? Aunque si pudiera hablar no creo que contara mucho, pues no se ha movido del lugar exacto de donde germinó en todo este tiempo.

Es uno de los sitios más bellos en los que he estado. A pesar del calorazo que hacía, una vez te sumerges entre los colosos vivientes la temperatura a ras de suelo se convierte en ideal. Dar una vuelta por allí es como pasear entre dinosaurios de madera. Para que os hagáis una idea del tamaño descomunal de los 'redwoods' echad un vistazo a las fotos y asombraos, pero no por la sombra que dan, que también. Allí encontré un hogar para mí dentro del tronco de uno de ellos...

Y por si os habéis quedado insatisfechos os contaré algunas cosas para que conozcais algo más sobre estos impresionantes "monumentos" (los llaman así y tienen razón). Tienen unas raíces largas y gruesas pero superficiales (podéis ver algunas en las afotos) y su manera de reproducción es curiosísima, usualmente en la base del tronco tienen unas estructuras bulbosas demoninadas 'burls' que es de donde salen los brotes que darán lugar a nuevos y, en un futuro, inmensos gigantes verdes (también en las fotos). La sensación que dá es que crecen como setas, así parece que viven en familias pues el original está en el centro rodeado de todos sus infantes, a veces ya creciditos. Además es interesante saber que los incendios naturales son comunes en la zona y forman parte del ecosistema. Es curioso ver trozos de los troncos con las negras evidencias y en algunos el fuego ha incluso cercenado el interior dejándolo hueco (mi cabaña en el bosque). Pero ahí siguen vivitos y coleando, esto ocurre cuando las cosas son naturales como la vida misma.

Además de flora también vimos algo de fauna (y como no también en las fotos con un bambi escondido). En este momento volvió a sorprenderme la cultura. Los seres humanos en apariencia apacibles y respetuosos se transforman y dejan ciegos a los pobres bichos con decenas de flashes dirigidos directamente a sus inexpertas pupilas sin ningún atisbo de conciencia.

El área era enorme para recorrerla en una mañana y además nos esperaba una rica comida en un restarurante mexicano con vistas a la bahía (!fotos!). Lo que ocurrió entre el restaurante y el helado que nos zampamos en las calles de San Francisco está confuso en mi mente y es que la siesta española es sagrada, incluso dentro de un coche.

El resto de la historia es la vuelta al hogar temporal que no tiene nada de particular para que os la relate.

24 de julio de 2008

Mission failed

Como bien indical el título ayer me embarqué en una misión fallida. Quería ir a conocer la 'Winchester Mistery House', que se encuentra ubicada en la 'Winchester Av.', muy cerca de la casa de TJC. Y no es un "pasaje del terror" como el del parque de atracciones aunque pueda sonar a eso.

Es una mansión victoriana con una estimación de 160 estancias que comenzó a construir en 1.884 Sarah L. Winchester, viuda del inventor del archiconocido rifle. Y para que comprendáis el completo significado de "comenzó a construir" necesitáis conocer la historia completa.

Ésta mujer perdió a su hija en 1.866 y a su marido en 1.881. Y aquí comienza el mito. Con tremenda tristeza decidió consultar a un medium. Ésta persona, por llamarla de alguna manera, le dijo que una maldición había caido sobre la familia y por eso murieron sus seres queridos. La explicación era que las almas de los cientos de fallecidos a causa del rifle Winchester buscaban venganza, y la solución que le dió fué que debía emigrar al oeste de su hogar en New Haven y construir una casa para ella y para los espíritus en cólera. Y además no podía dejar de construirla, en el momento que estuviera terminada o las obras cesaran ella también moriría.

Ésta tremenda perspectiva la llevó hasta California donde compró un terreno para establecer la mansión. Según cuenta la leyenda contrató varias cuadrillas de obreros y carpinteros que se encargarían de todos los trabajos, que fueron ininterrumpidos desde la fecha de inicio hasta el 5 de septiembre de 1.922, 38 años después, fecha en la que ella falleció.

Era heredera de una inmensa fortuna y dueña de casi el 50% de la compañía que fundó su difunto marido, "Winchester Repeating Arms Company", lo que le proporcionaba una buena suma mensual, así que no tuvo ningún problema en mantener las labores de construcción durante todos esos años. Y la primera idea que se me viene a la cabeza es el chollo para los currantes, treintaocho años de trabajo asegurado y bien cobrado.

Sea cierta la historia o no, lo que sí es real es la mansión con todas sus extrañezas. Aún viviendo sola existen cosas tales como 40 dormitorios (para que descansaran los fantasmas supongo), 17 chimeneas con evidencia de dos más, algunas de ellas ciegas, escaleras que terminan en el techo, puertas por encima de la planta baja que dan a la calle (a una ostia de la ostia) o a una estancia de techos altos pero muy por encima del suelo, armarios que si abres la puerta te encuentras con la pared, el número 13 está presente por todas partes (13 cristales por ventana, 13 módulos por muro...) y un sinfín más de rarezas.

Pero eso no es todo, Sarah no tenía un plan en mente así que para mantener la construcción a un ritmo constante tenía gente trabajando las 24 horas del día. Y las estancias se remodelaban contínuamente o incluso se demolían para volver a construirlas de nuevo. La casa llegó a expandirse hasta alcanzar siete alturas, pero el fuerte terremoto de San Francisco de 1.906 destruyó las tres plantas superiores. Aún así no ha perdido su magnificencia.

Como datos curiosos aportaré que tras su muerte a los 83 años de edad sus familiares desalojaron los muebles y ornamentos y vendieron el edificio, y la cultura popular dice que debido a su laberíntica estructura los trabajadores tardaron más de seis semanas en sacarlo todo. Además el recuento de estancias se repitió una y otra vez dando un número diferente en cada ocasión, por eso es una estimación.

'Finally' no entré dentro, y es que aparte del dineral que costaba era una visita guiada de la que no te podías apartar ni un poquito. Y yo eso de ver lo que ellos quieran cuando ellos quieran mientras escucho lo que les apetezca contarme como que no. Me hubiera gustado explorarlo por mi mismo y perderme por sus pasillos, nunca mejor dicho. Así que al menos me aprendí esta curiosa historia y la compartí con vosotros.

¿Os gustó?

P.D.: supongo que estará mezclado ficción con realidad pero hay que ver la vida más perra que te hace experimentar el tener determinadas creencias. Dedicar todos tus esfuerzos personales y económicos a construir una casa interminable para no morir a manos de espíritus enfurecidos... O tal vez sólo es el reflejo físico que dejó tras de sí la tristeza y la locura de perder a las dos personas a las que más amas. Sea como fuere me pareció interesante.

22 de julio de 2008

Driving U.S.A.

¿Cómo empezar sin herir sentimientos de patriotismo..? Ah que hacia España no los tenéis... Eso lo hace mucho más fácil. ¡Cuánto atraso en el tema de las carreteras tenemos!

He de decir que no he conducido mucho por aquí. Principalmente por que no tengo coche y secundariamente porque al que tenía acceso (el de TCJ) lo rayé con la columna de la plaza de aparacamiento, así que las pocas ganas que tenía se me quitaron. De todos modos he podido hacerme una idea de lo que es circular en un turismo por las 'ways' estadounidenses.

Hablemos de vías en poblado. Pueden llegar a sen tan grandes como la Castellana, lo que no es raro, y se denominan atendiendo al número de 'lines' por lo que se puede circular. Así pueden ser 'drive', 'freeway', 'expressway' y no sé cuantas más. Primer punto a favor, el nombre ya te indica el tamaño.

También tienen una extraña manera de dirigir el tráfico, que me resultó chocante al principio pero que una vez metido dentro de tu vehículo es de lo más lógico (nunca he visto un atasco dentro de una ciudad). No hay ni una sola glorieta, si llegas a un cruce donde no hay semáforos o preferencia se respeta un estricto orden de llegada o bien un carro de cada lado por turno, y siempre que no se indique lo contrario se puede hacer un giro a la derecha cuando haya semáforo, éste luzca rojo y no venga nadie por el carril al que te incorporas. Existen además unos carriles centrales que no pertencen a ninguno de los dos sentidos y ambos a la vez, y que sirven para no entorpecer a los demás cuando vas a girar a la izquierda para entrar a un 'mall' o cuando sales hacia tu siniestra (la velocidad es reducida en ambos casos).

Y lo más curioso lo encontramos en los grances cruces. Los semáforos se encuentran en la línea de parada y en la acera de enfrente, así puedes verlos aunque pares justo debajo de los primeros. Las placas con los nombres de las calles cuelgan de estas grandes señales luminosas lo que hace muy fácil su lectura (recordad la tortícolis cuando mirais los letreros por las fachadas de Madrid, si están claro). Pero lo verdaderamente sorprendente de estos 'crossroads' son los turnos de circulación. En una primera fase se ponen en marcha todos los que estén en una calle (ambos sentidos) que vayan a girar a la izquierda (a la derecha se puede casi siempre si no viene nadie) o hacer un cambio de sentido. Sí, sí, se puede hacer cambios de sentido en casi todos los cruces en incluso entre cruce y cruce tienen carriles especiales para ello (que gran invento, si te pasas tu destino no pasa nada, no es necesario dar 20 vueltas). Es curiosísimo de ver. Y en una segunda fase más familiar para todos vosotros se ponen en marcha los que van de frente. Luego lo mismo pero para la otra calle.

Y qué decir de las 'haighways'... Cuatro, cinco o seis carriles por sentido. Qué quita el sentido vamos. Señalización perfecta de desvíos y direcciones. Muchas de las señales son escritas en vez de imágenes representativas, con lo que habría que inventarse un nuevo nombre para ellas como "escritales" y puedes encontrar algunas tan insólitas como 'Report druk drivers - call 911' que te pide que llames a la policía si vés un conductor ebrio. No podemos obviar los reflectantes en el asfalto que hacen visibles las líneas discontínuas de noche ni del carril de alta ocupación.

Voy a profundizar un poco más en éste último. Se puede utilizar cuando viaja más de una persona en el coche (imaginaos como está el tema aquí) y según me han contado varios residentes de dispararon las ventas de muñecas hinchables en el momento de su puesta en marcha. Otra opción es comprarte un 'enviromental car', los que tienen motor eléctricos y de gasolina, que vienen con una pegatina que te permite circular incluso si vas sólo (consume mucho menos que los otros).

Por último pero no menos importante hay que añadir que casi nadie hace sonar su claxon. Son muy educados en este aspecto. Y señalar que los tamaños de los coches van a juego con los de las autopistas.

A pesar de todo esto tienen unos atascos del copón en hora punta, como todo hijo de vecino. Y aunque más barata que en toda europa se quejan de los precios de la gasolina. Claro, tanto 'pickup' y tanto 'hammer' y luego no llegamos a fin de mes.

Así que aunque conducir es una actividad a la que le tengo un poco de tirria, el hacerlo en este sistema lo hace mucho más llevadero. Y al que le guste conducir y tenga un BMW incluso placentero.

Hasta la próxima amig@s.

19 de julio de 2008

History of video games

Hola amantes de los videojuegos, porque éste es el tema de hoy. Es una aficción que vengo arrastrando desde mi más tierna infancia, y con mis casi ya 30 tacos a la espalda tengo aún las mismas sensaciones que entonces cuando me pongo delante de una pantalla con muñecos de colores.

Antes de empezar quiero dedicar este capítulo del blog a mi primo Luisito, que si hace el esfuerzo de leerlo entero le traerá muuuuchos recuerdos de la suya también (la infancia claro), con él empecé a cogerle gustillo a apretar botones como un loco, fué mi compañero de partidas durante muchos años y aún 'nowadays' de vez en cuando meneamos los pulgares con su play.

Primero el principio. Un poco de retrospectiva para saber de qué estamos hablando. El videojuego como lo entendemos hoy día nace en Silicon Valley, en la zona donde estoy afincado aquí en USA, de la mano de la empresa ATARI con PONG. El juego consistía en dos barras situadas a ambos lados del monitor que hacían las veces de raquetas y que sólo podían subir o bajar para endiñarle un golpe al cuadrado que se movía como si fuera la pelota. En la parte superior aparecía un marcador y la pantalla estaba dividia en dos por la red. El interfaz eran dos ruletas que podían girar en ambos sentidos (yo tenía una parecida de pequeño, a ver si la recupero).

Pero existieron antecedentes que la cultura popular tiende a ignorar.La creación original que se podría denominar como videojuego fué realizada en 1957 por William Higginbotham, un físico que trabajaba para el gobierno de los EEUU. Modificó un osciloscopio y conectó un par de periféricos para poder manejar el "Tennis for Two", nombre que le dió. El juego se hizo muy popular entre familiares, amigos y visitantes de las instalaciones. Un genio o un loco. Seguramente las dos.

Casi diez años después, en 1966, Ralph Baer, ingeniero de radio y televisión judío que había trabajado para el ejército en Norteamérica, construyó un dispositivo que permitía la aparición de puntos en la pantalla. Esto permitió la concepción de un primer juego consistente en un punto que perseguía a otro a lo largo y ancho de la pantalla, uno era el zorro y el otro la presa. El diseño no se alejaba mucho de un aparato de TV antigüo con su tubo de vacío. A partir de ahí desarrolló juegos basados en los deportes, uno de ellos el precursor de PONG.

Otro salto en el tiempo y llegamos a los años 70, donde además de hippies, sex, sex, drugs and rockandroll hizo su aparición en escena Harold Lee, creador de ATARI, quién tras visitar unas ferias donde conoció el trabajo de Ralph Baer decidió tomar la idea como propia y diseñar PONG, primero de una serie de exitosos títulos que surgieron en forma de máquinas arcade en un principio y consolas domésticas más adelante.

Y el principio termina con una batalla legal entre estos dos monstruos del entretenimiento que tuvo como resultado la compra de los derechos del juego por parte de ATARI y la entrada a mansalva de dólares en la empresa a partir de entonces. Una pena que el verdadero 'Father of video games' se haya quedado sin un duro de su invento y en el anonimato. ¿Quién conocía a Ralph Baer antes de leer esto? Como apunte comentaré que ATARI tuvo un gran éxito como empresa debido a su política de innovación, hasta que la adquirió la Warner quién la hizo ir a la quiebra al cargarsela.

A partir de ahí el resto es conocido por todos, cada vez máquinas más potentes y videojuegos más perfectos técnicamente hasta el día de hoy. Supongo que el futuro será la realidad virtual, inmersiones en realistas escenarios 3D prácticamente indistinguibles de la vida cotidiana para seguir matando extraterrestres.

¿Y porqué nos suelta este tío toda la parrafada? Pensareis. Como siempre todo tiene sentido y está hilado igual que las lentejas. Y es que hace unos días estuve buscando el museo ATARI porque creía que se ubicaba cerca de la casa de TJC, y despúes de unas cuántas vueltas desistí. Me hacía ilusión la idea de ver el origen de todo esto, las máquinas originales y demás. Así que como quedé un poco decepcionado y con un vacío en mi interior, y además estoy en el país de las rebajas permantentes para los europeos, decidí comprarme mi propio museo interactivo sobre la historia de los videojuegos.

Vale, sí, es una Play Station Portable, pero dicho así queda muy soso. Busqué por la zona un chino para que me la pirateara y lo conseguí. Con esto último queda demostrado que mi inglés va viento en popa a toda vela. Y con este 'portable museum' con 'custom firmware' no he tenido más que bajarme de internet un recopilatorio de juegós clásicos y otro de juegos míticos para hacer la visita en casa.

Estuve jugando por encima a juegos de SEGA y CAPCOM (los de ATARI son más viejos que yo, eso lo dejo para cuando visite el 'building museum'). Os suelto la retaíla que seguro que algunos os suenan: Sonic, Golden Axe, Altered Beast, Street Fighter II, Metal Slug, Shinobi, Commando, Mercs, Knights of the Round, Ghosts 'n Goblins, Kid Chamaleon, Bonanza Bros... Y si no os suenan por el nombre mirad las fotos que seguro que los recordáis. He hechado de menos algunos como Capitain Commando, Double Dragon, Forgotten Worlds, Final Fight y algún otro del que no recuerdo el título, pero en general estaban todos.

Qué recuerdos! Es increíble como funciona la memoria. La primera consola que tuve fué una Sega Megadrive y jugué a muchos de los títulos anteriores. Y antes de eso era aficionado a las recreativas de las que también hay unos cuantos. Lo primero que me sorprendió es que me emocioné al volver a jugarlos, era como volver a la infancia. Al igual que los sabores o los olores, la visión de los gráficos pixelados y el sonido esas deliciosas melodías maquineras y repetitivas despertaron algo en mi interior, rememoraciones de juventud. Me invadían imágenes del pasado relacionadas con los momentos donde éstos precisos videojuegos estaban en escena e incluso de cuando eran otros. Además sabía perfectamente cómo jugar a cada uno de ellos y aparte tenía recuerdos de cosas inauditas, que estaban enterrados en lo más profundo de mi córtex anterior cingulado, como trucos en determinadas pantallas, combinaciones especiales de botones o cómo hacer aparecer elementos secretos.

Debe ser que aprender a jugar a un videojuego es similar a aprender a andar en bicicleta o conducir, ambas las tres requieren de coordinación oculo-manual y se almacenan en la parte inconsciente del cerebro. (Sí, necesito una explicación para cada suceso. Y si no la tengo la busco o me la invento, mientras me quede agusto...).

Los videojuegos son relativamente recientes comparados con la pintura, la escultura o la música, pero no tanto al lado del cine. Es más, esta industria ya ha desplazado a Holywood y se se ha encaramado a la cima del entretenimiento. Cuando se hace un videojuego está involucrada muchísima gente, desde los que tienen la idea y desarrollan la historia y los personajes hasta los que hacen maravillas con la informátiva para que aparenten tan fantásticos, y bandas sonoras creadas específicamente para ellos.

Pensando en todo esto se me ocurre una reflexión filosófica. ¿Es la creación de videjuegos comparable a la creación de arte? Es decir, con indepencia sobre gustos o preferencias, ¿son los videojuegos una expresión artística interactiva?



(Esta es mi nueva PSP de saldo)

15 de julio de 2008

Mi otro nuevo bajo...

Sí, tengo otro bajo nuevo. Qué pasa?

No es que me haya entrado la fiebre del consumismo, que también. Es que para no perder las buenas costumbres he cambiado mi antigüo bajo nuevo por un nuevo bajo nuevo. Y es que el anterior venía con un defecto. El error de fabricación en cuestión se llama 'indenosequé', y es que en el mástil tiene como un hoyo prácticamente imperceptible que hace 'buzz' al tocar algunas notas . Y yo pensando que era un manta poniendo el bajo a punto... Después de hablar con mi sensei local me fuí directo a la tienda a ver que solución me daban.

El mundo está lleno de encargados listillos, la diferencia es que aquí les tengo que pedir por favor que hablen más despacio para entender sus tretas. Todo empieza un jueves, el 'manager' de la 'bass area' quiere colarme que el bajo estaba en perfectas condiciones y para ello hace una demostración de cómo se toca un bajo evitando pisar con los dedos (se dice así) precisamente en los puntos P. Este tío piensa que los españoles somos gilipollas. O si no debo tener cara de pringao por aquí. Le pido por favor (aquí se pide todo así: perdona, por favor, me la estás intentando colar...) que haga lo mismo pero incluyendo en la sinfonía las notas que anteriormente le había indicado que no se escuchaban 'properly'. Y el tío después de hacerlo intenta aún subir las cuerdas a la máxima altura a ver si así no zumban en esos delicados sitios, y no se mucho de bajos aún pero así no hay quien toque. Menos mal que seguía sonando ídem que si no me veo liado en una discusión en inglés y eso requiere un gran esfuerzo mental jedi para mí.

El mayor problema es que se habían pasado los 30 días de garantía, pero mi defensa perfecta es que cuando me enviaron el bajo por UPS no traía factura ni garantía ni papeles 'but the bass guitar'. Así que como nadie es perfecto, ni ellos ni yo, hay que llegar a un acuerdo (buena excusa eh?). Me propone que al día siguiente llama a Fender (el fabricante) a ver si tienen otro en 'stock' (esto se llama igual que en castellano) y que va a 'call me bak' (llamarme patrás que dicen los mexicanos) el mismo día, así si no hay otro igual puedo elegir otro cualesquiera de entre los que tienen en la tienda.

El día siguiente acudí a mi experiencia surfera así que alejé de 'my mind' los pensamientos sobre este problema para concentrarme en sobrevivir al océano pacífico y a la siesta que terminó el día después (del cansancio).

Como no había tenido mi esperada llamada patrás (imaginaos como se hace eso...) y ya era sábado, cojo de nuevo el antigüo nuevo bajo y me presento en la 'store'. El 'notas' del otro día no está (el nombre le viene que ni al pelo) y el 'manager' del momento no sabe nada del tema, así que a volver a empezar. Era más majete y profesional que el del jueves pero la respuesta sigue siendo la misma, que el lunes llama a Fender. Pensé si estaban jugando conmigo al 'manager' bueno - 'manager' malo, y es que no pierdo mi sentido del humor aunque la situación sea desagradable. Haré un inciso para recordar (o dar recuerdos, como más le guste) al Toni, a quien le parecía 'hilarious' que me hiciera gracia a mí mismo, y es que si a mi no me hace gracia mi humor propio... Bueno retomamos el hilo, le explico que estoy viviendo un 'déjà vu' y que no quiero pasar el resto de mis vacaciones haciéndoles visitas cíclicas con el bajo a cuestas. Así que quedamos en que el lunes me paso y llamamos juntos, si no tienen otro igual me lo cambia por otro que me gustara pero del mismo valor o superior. No le discutí porque llevaba las de perder pero sí le dije que el otro listo no me había dicho eso precisamente. Que lo sepas.

Un punto negro es el tiempo, que no hay suficiente para que me envíen otro, y el otro es que al contrario que me dijo el menda "malo" sólo puedo cambiarlo por productos cuya suma sea igual o mayor al precio del bajo 'original'. Así que el lunes de vuelta para allá con el bajo a cuestas otra vez (ya nos habíamos hecho amigos con tanto viaje juntos y me daba penita dejarle allí tirado, pero...). Después de hablar con Fender me dice que tienen uno en San Diego, pero que va a pedir al chaval de la tienda que lo pruebe antes de nada, no vaya a ser que tenga algo fuera de lugar. Y al final resulta que tiene el mismo fallo, que es un defecto de fábrica que deben tener todos los bajos de esa tirada. A por la única opción que me queda entonces, que es coger un bajo de allí para llevarmelo bajo el brazo para casa.

Buffffffff, si antes estaba un poco agobiado con solucionar el tema antes de mi partida, imaginaos ahora. Con un presupuesto cerrado, encerrado en una sala llena de bajos, sin mucha idea de cómo probarlos bien y con mi indecisión característica (me costó más de dos semanas elegir el anterior). Me pasé el casi el resto del día mirando, probando, tocando, preguntando... Los que me molaban eran demasiado baratos, los que costaban como el mío no me convencían, y cuando por fin me decido por uno que me gusta... Zas! También zumba en algunos trastes. O es mala suerte o esta gente no es de fiar.

Bueno entre lo poquito que sé yo y lo que sabe un currante majete (éste majete de verdad) de allí intentamos ajustarlo a ver si lo afinábamos bien. Pero no habiá manera.Tensando el alma, destensándola, quintándolo... Esto requiere su tiempo así que mientras sigo mirando y veo a un tío que coge un bajo al que había hechado el ojo y se pone a probarlo, suena de puta madre. Empiezo a hablar con él y me dice que el bajo que había elegido yo le gusta mucho. Le comento lo del trasteo (cuando zumba la cuerda en un traste) y le pregunto que qué tal está el bajo que estaba probando, que me gusta bastante. Como su respuesta fué que lo había probado a conciencia y estaba de lujo, que él tenía uno igual desde hace muchos años y le había salido fetén, además el otro no lo habíamos conseguido arreglar y por otra parte el precio era exactamente el mismo que el que iba a devolver y también Fender Jazz Bass que era lo que buscaba desde un principio pensé que tantas señales no se podían ignorar.

Que me lo envuelvan para regalo que me lo llevo! La historia termina con un saldo a mi favor de algo más de 100 'bucks' que no entendí mucho pero que tampoco critiqué, pues genial, mejor todavía. Así que vuelvo de nuevo al rollete de los trastes, en los sin trastes que tenían allí no iban marcadas las línas donde hay que pisar y no soy tan imprudente.

Se me olvidaba, tiene nombre: Fender American Vintage '75 Jazz Bass. Y luce bien 'chido'. Además el forro de la funda es lo más hortera que he visto 'in my whole life'.




P.D.: Kike vete despidiéndote de los trastes del bajo que conoces, que no me voy a quedar yo con el mono de tener un bajo 'fretless'. Así lo uso de laboratorio de pruebas para "trastear" con él que aprendo algo seguro.

14 de julio de 2008

Especial MOMA

Y como lo prometido es deuda ahí va esta visita guiada por el Museum Of Modern Art de New York.

En mi visita a la Gran Manzana me acerqué una mañana por el MOMA, lo que no dije es que la entrada me la regalaron, pero tengo que dejar algo para contar a mi vuelta. Dentro de este insigne edificio tuve un montón de sensaciones distintas, tanto buenas como malas. Eso es el arte, supongo...

Para todos aquellos que estén interesados en ello y no puedan acercarse por allí a verlo voy a hacer de guía por las distintas exposiciones que visité. Tomé fotos de todo aquello que me llamó la atención para que tengáis también un registro gráfico y podais haceros una imagen mental de todo lo que os voy a relatar. Así que ponganse los cascos que empezamos la visita.

Nada más entrar al edificio tienes que dejar la mochila en un ropero que más bien parece la oficina de una comisaría de policía cualesquiera. Hay un pero, y es que te tienes que llevar contigo todos los objetos de valor, así que con los bolsillos hasta arriba comienzo a conocer todo ese nuevo mundo lleno de colores.

Decido empezar por abajo e ir subiendo, la manera más lógica a mi parecer, aunque hay gente que lo hacía al revés, de incongruentes está el mundo lleno, y el mundo del arte más todavía... Lo que te recibe en el primer hall es un ventilador colgado de un alto techo por un cable larguíiiisimo que está dando vueltas libremente por la sala, esa es la primera obra de arte que ví. Para mí la cosa empezaba como un chiste pero para los niños era un juego magnífico perseguirlo corriendo detrás de él. Según voy pasando por las salas me invade una sensación de decepción, y pienso que si esto es arte moderno yo no lo entiendo, o al menos no me gusta.

Os explico, la planta baja es donde tienen el arte más vanguardista y tiene muchos audiovisuales. Consiste en cosas como una pantalla de televisión emitiendo el ruido de fondo de un vídeo VHS, la proyección de dos tipos destrozando un jardín y destripando un coche, un vídeo de una tipa chupando y lamiendo una botella verde que tiene un agujero del que sale un líquido blanco con el que juega, las fotos de Carlos Sobera antes y después de afeitarse, un proyector de diapositivas enchufado, otro proyector de cine emitiendo una película en la que se ve ceniza cayendo sobre una máquina de escribir, fotos de un tipo haciendo gestos con su boca, un par de sillas de pie en la pared, un vídeo de una mujer desnuda bailando un hulahop hecho con alambre de espino hiriéndose en el abdomen, otro vídeo en el que aparece una mano y con la otra se va poniendo hojas encima hasta rellenar completamente esa forma... Y así podría seguir.

Aunque no soy muy ducho en estos temas supongo que es arte porque te hace sentir cosas al observarlo, sentimientos como sorpresa, rechazo, indiferencia (si se puede considerar como tal), incomprensión y toda una gama parecida. Pero realmente no disfruté paseando por las salas. Eso sí, mi imaginación voló dándole vueltas al concepto de arte, y comencé a pensar que sí cogía una cámara y me grababa a mi mismo mientras desarmaba, desmontaba y destrozaba el trabajo de toda esa gente y recogía las reacciones de los espectadores también sería arte, y podría exhibirse en dos episodios junto con otra grabación de las consecuencias que me acarrearía ese acto. Personalmente es lo que me pareció la planta baja del MOMA, un chiste de mal gusto. Lo único que me gusto fué un cartel que decía, "NO ES ARTE (eso cuenta ahora)" ya que resumía mi opinión general, pero a lo mejor estoy yo más pirado que los artistas que allí exponen, quién sabe...

Empecé a pensar que si todo el museo era así iba a perder la mañana allí. Pero todo cambió cuando llegué a las escaleras mecánicas por las que se ascencía a la primera planta. En las fotos no lo podéis apreciar, se ve todo amarillo, y en efecto el fondo se veía amarillo "in situ", pero podías ver venir a la gente a todo color, y cuando se iban para arriba les veías alejarse en blanco y negro. Qué puntazo! Yo tenía que subir allí. Así que me monté en las escaleras y ví pasar mi percepción de una amplia paleta de colores a un fondo amarillo con los paseantes en blanco y negro. El efecto estaba producido por unos flexos que emitían una luz especial, yo supongo que no era nada bueno para los ojos porque al mirar de un lado a otro la imagen titilaba, pero era guapísimo. Nunca había experimentado algo así.

Esta planta me encantó, el artista que exponía allí se llama Olafur Eliasson y me impresionó. No había visto nada parecido antes, el tío juega con los espacios, con la luz e incluso con los espectadores mismos. Allí estábamos los adultos convertidos en los niños que corrían tras el ventilador una planta más abajo. Se podían ver cosas como el mundo en amarillo, blanco y negro que os he descrito, una habitación redonda cuyas paredes luminiscentes iban cambiando de color paulatinamente, estructuras metálicas reflectantes instaladas en las ventanas, una sala casi oscura en la que podías ver las gotas de agua cayendo una a una, un cubo hecho de luz, una sala en la que un espejo daba vueltas y reflejaba a ráfagas la luz proveniente de un fuerte foco reflejando la sombra de los espectadores, un pequeño pasillo en el que no cabían ni 10 personas y que con cuatro espejos y dos focos convertía en una gran sala con seis entradas y llena de gente y otra habitación en la que una especie de megaprisma iba mezclando luz de colores en movimiento que se reflejaba en las paredes y de nuevo eran las sombras cambiantes y coloreadas de los espectadores las que constituían la obra de arte viviente (para la proxima fiesta yo quiero uno de esos...). He de decir que me encantó la obra de este tío y además poder ver a la gente jugando por las salas como si de niños pequeños se tratara, divirtiéndose y asombrándose. Si hubiera ido con todos vosotros, truhanes, hubiera sido unas risas seguro (también la planta de abajo, jejeje).

Las otras dos plantas son algo más convencionales aunque sin perder el toque de 'nouveau art'. Con convencional me refiero a que son sobre todo cuadros y esculturas, pero bastante vanguardistas, os dejo entre las fotos las que más me llamaron la atención. Me gustó una zona dedicada a la geometría (mi mente y su lógica...) en la que ví un cuadro que me recordó muchísimo a Miró pero con líneas y ángulos rectos. También se podían encontrar cosas curiosas como un maniquí vestido mirando a una esquina (como castigado), un traje colgado a 5 m. de altura, unas medias con tirantes y botas, comida de cartón piedra, un desayuno inalcanzable, un galimatías que quien lo haya hecho no está en su sano juicio, una montaña de basura en medio de un hall o un cuadro a todo color de los 50 estados norteamericanos que refleja fielmente mi punto de vista de la geografía.

Especial mención merece una zona del museo que bautizaré como MIKEA (la Ikea del museo), era la parte dedicada a nuevos diseños, pero a mí me parecía una tienda de hogar pija (que es lo que es en realidad, lo más 'in'). Se puede destacar de aquí las lámparas de los pastilleros, un teléfono góndola que se cuelga en vertical, figuritas de lego hechas por... (no tengo palabras para describirlo, me pareció otro chiste malo), instrumentos musicales electrónicos y la flamante casa donde quiero vivir a juego con la antigua mecedora mejorada con reposapiés para el porche.

Aparte de la segunda planta lo que más me gustó fué un libro totalmente recubierto de objetos punzantes y cortantes (no habéis de olvidar que la lectura es peligrosa) y la colección de dos volúmenes titulada "A Million Years", eran dos libros en los que se podía leer una lista de años desde el nosecuántos b.C. hasta el otrostantos a.C. mientras por los altavoces una voz insulsa los iba recitando uno tras otro, la verdad que solté una buena carcajada allí mismo. Ésto último se encontraba en toda una zona que dedicaban al libro.

Y poco más, sólo decir que debido al fracaso del anterior concurso os propongo otro. Entre todas las fotos se ha colado una que no es una obra de arte, hay que adivinar cuál es. Y además hay un loro con un mapa, una pierna humana y una bola del mundo colgando. Al que me dé la mejor explicación de su significado le caerá un regalito extra a mi regreso.

Pues eso, que os echo de menos a todos y que ya falta poquito para mi retorno. Besos y achuchones.



P.D.: otra foto especial dedicada a Dani "ruedines". Son los 'Spider Shoes'. Sirven para andar por las paredes y el techo, creo... Quise llevármelos para tí, pero estaban metidos en una urna de cristal vigilada por un tío más grande que la masa.

12 de julio de 2008

Surfin' U.S.A.

Saludos a familiares, amigos y resto de lectores (que no serán muchos supongo). Ayer estuve practicando surf. Que weno!

Algo temeroso del gran Jaquetón quedé con los instructores en una playa perdida de la mano de dios, a la que me tuvo que acercar Barb con el coche. El sitio precioso y el tiempo... bueno, nublado y frío, perfecto para este deporte.

Después de encasquetarme el 'wetsuit', porque no hay otro modo de ponérselo, me dan una tabla blanda que era como dos veces yo de larga y a cargarla hasta la orilla del mar. Allí unos minutos de calentamiento y breve explicación de cómo hay que ponerse de pie cuando sientas que la ola está justo debajo tuyo. Y al agua.

Al llegar yo veía las olas chiquititas, y pensé que era una pena, que no ibamos a surfear nada. Qué equivocado estaba, al entrar en el agua con la tabla cambia totalmente tu percepción de la fuerza de la naturaleza. Tenía que pelearme con esas olitas para llegar donde estaba el profe, que era como a unos 15 m. de la orilla. Parece fácil cuando lo ves hacer a los profesionales pero te das cuenta de lo que puede hacer el océano contigo... Y eran las mismas olas escuchimizadas que cuando llegué.

De repente se convirtieron en un temporal para mí. Arrastrando la tabla caminando mar adentro y evitando que las olas rompieran justo encima mía fué la mitad de la 'lesson'. La otra mitad fué la divertida. El profe te sujetaba la tabla y esperaba a que viniera una ola pequeña (diminuta según el punto de vista de un observador exterior) y entonces te daba la orden de que remaras. Que jodido es remar, se supone que tienes que adquirir 'momentum' (velocidad) antes de que te alcance la ola, si no no puedes cogerla. Así que con un buen empujón del profe te ponías en marcha (si no imposible para mi) y a menear los brazos intentando ir lo más rápido posible. Y mientras atento a la segunda orden que era 'stand up', y a ponerse de pié. Tanto si salía bien como si salía mal volvías a empezar el ciclo intentando llegar de nuevo al profe.

No se me dió mal y tras un par de intentos fallidos 'I was riding a few waves'. El equilibrio no era mucho inconveniente, pues tras un rato con la tabla te haces con ella, el principal problema es ir con la suficiente velocidad para ponerte de pié y que le ola te lleve con ella. La sensación es curiosa, vas de pié manteniendo el equilibrio mientras el mar te empuja hacia tierra, es divertido.

No creo que repita porque es una faena hacer madrugar a Barb para que me lleve al medio de la nada, pero ya fuí 'surfer' por un día.

Un par de comentarios de interés. Éste es el deporte más cansino que he probado, en menos de dos horas estaba más cansado que todo un día bajando por la nieve (es que pelear contra el mar es agotador). Y descubrí que hay una enfermedad que llaman 'surfer's ears' (oídos de surfero), y es que de tanto tiempo que tienen las orejas metidas en agua fría (que mira que está fría el agua del océano Pacífico) se les vá cerrando el oído y se quedan sorderas de la muerte. Así que como consejo final y en especial para la gente de Madrid: si vais a convertiros en surferos asíduos compraros tapones y una casa en la playa.

Aaaaaaaaaadios.

2 de julio de 2008

New York, New York

Buenas a tod@s después de este merecido descanso. Y con algo de retraso pero sin desperdicio comparto con vosotros mi experiencia 'Newyorkina'.

Otra vez de aeropuertos, escalas y cambios de aviones, me estoy acostumbrando, ya se ha convertido en casi automático lo de sacar las cosas del neceser fuera, enseñar la cartilla a todo el que lleve uniforme y casi desnudarte para pasar por la puerta que pita. Pero como nadie es perfecto a la vuelta me dejé olvidada la botella de agua en la mochila y me llamaron como dueño del equipaje sospechoso cuando lo pasaron por rayos X, no pasó de ahí la cosa esta vez, fiuuuuu...

La ida de unas seis horas y pico de vuelo en un par de aviones y con retraso incluido, tuvimos que esperar una hora parados en tierra en el aeropuerto de Minnesota porque el de New York tiene mucho atasco y no nos iban a dejar aterrizar. Ya en Newark (New Jersey) cojo mi equipaje y ala, a buscar la manera de ir a la isla donde quería pasar mis vacaciones. Pregunto en el mostrador de información de transportes (tienen una específica) y me venden un billete de ida y vuelta en autobús al centro de Manhattan (la isla), la ida en el momento y la vuelta abierta para cuando quiera prácticamente a la hora que quiera. Así que me monto en el bus y al llegar a la parada me bajo y me encuentro en medio de...

LA GRAN MANZANA. Estaba en la misma '42 street', la calle con más vidilla de la ciudad. De repente entras en un estruendo de viandantes, coches, luces, tiendas, currantes... y yo más perdido que Marco el día de la madre. Así que a llamar desde una cabina al hostal para saber cómo llegar, con lo poco que me gusta hablar por teléfono en inglés. Me indican y al 'subway', estoy acostumbrado al metro así que no me pierdo por los pasillos, andenes y transbordos. Una cosa que me gustó mucho es que es muy fácil orientarse, las calles son todas paralelas o perpendiculares con una gran isla verde en el centro de la isla, valga la rebuznancia, y están numeradas en orden creciente de Sur a Norte y de Este a Oeste, con excepción de algunas. Así que si algo está en la '33' con la '6 av.' sabes en que parte de la ciudad exactamente. Esa tarde-noche la pasé en el hostal, cenando algo y de cháchara con un grupillo de gente muy maja que conocí, pero que se iban al día siguiente. Luego a la piltra, que cuando llegué ya estaba todo el mundo sobao.

Por la mañana me despertaron un grupo de adolescentes de Bilbao que eran mis compañeros de habita, a las 8 am. Pero que horas son esas para unos españoles de vacaciones. Así que me pegué un duchazo, desayuno y a patear la ciudad. Dormía en la zona norte de la isla, que no es pequeña, pero cerquita de Central Park. Así que me piro al parque y me lo ando de Norte a Sur, enterito pero con paradas para escuchar los grupos de jazz que tocan en directo para vender sus discos. Te puedes sentar a comerte un 'hot dog' mientras te relajas un rato mirando y escuchando. Central Park es bastante grande, y está justo en medio de Manhattan, la verdad es que se agradece un remanso de paz en medio del bullicio de la ciudad. Tiene unos rincones preciosos y lo que más ví fué gente corriendo, pero era por hacer deporte no huían de nada creo. Allí tienen una estatua de 'Alice's Adventures in Wonderland ' que a los niños les encanta, fué cuando descubrí el trasfondo de la historia de Lewis Carroll. Si os fijais donde está sentada Alicia descubrireís el porqué persigue a un conejo que dice que llega tarde mientra mira su reloj, se cae a un hoyo que le lleva a "otro mundo", tiene problemas con los tamaños de los objetos, toma café con unos tíos raros celebrando el no-cumpleaños y ve a un gato que se desvanece y sólo queda la sonrisa...

Se acaba el verde y empieza de nuevo el caos. Es increíble, andas unas decenas de metros y es como cambiar de mundo. Es la ciudad más ajetreada y ruidosa en la que he estado, pero encantadora a la vez. El resto del día lo dedico a pasear por '5th avenue', la calle de las tiendas pijas, '42 street' donde ví a bailarines de breakdance que tras el espectáculo tuvieron visita uniformada para cortarles el rollo de pedir en la calle (hay reportaje gráfico) y tunantes del top-cubo, que es como el top manta pero de colonias ilegales, maaaaadre mía como se arremolina la gente para comprar estas cosas, iiiincreible. Y más sitios famosos como 'Times Square' y 'Rockefeller Center'. Toda esa zona es la que habeís visto en la tele con edificios altos, banderas de USA, mogollón de gente y los taxis amarillos. Algo de 'shopping' para los regalos de la vuelta y pal hostal. Es la primera vez que me duelen las rodillas de andar tanto, y me estuvieron dando la lata el resto del fin de semana. Es que me pegué una buena pateada y/o que ya estoy mayor.

Esa noche tuve que cambiar de habitación y allí conocí a mi colega de excursión, Mark, he de decir que es de Korea y no de Taiwan, jajaja... Os lo explico y los que me conoceis lo entenderéis. El chico me dijo que era de Korea y a mí se me metió en la cabeza Taiwan, así que me pasé el resto del finde semana preguntándole cosas sobre Taiwan, jajaja. Al principio parecía que no le hacía mucha gracia pero acabó aceptándome como soy. Nos fuimos a cenar a un restaurante francés y luego a un garito de jazz a tomar unas birras, allí ya me dejó solo y se fué a la cama, así que acabé charlando con un universitario americano que hablaba mejor castellano que mucha gente que conozco, y es raro por aquí. Fué un buen trato, yo practicando inglés y el español. Hay que ver lo sociable que te vuelves cuando viajas solo, yo acabo hablando hasta con los manteles de las mesas.

Otro día más y por la mañana y al MOMA ('museum of modern art'), las sensaciones que tuve allí dentro os la cuento en un especial MOMA, porque da para ello, con fotos incluidas. Y tras el museo a un concierto de música africana en Central Park. Por el camino me pasó una cosa curiosa, iba andando yo por la '5th av.' y de repente veo una tienda de ropa con una cola para entrar como si fuera una discoteca en hora punta, los dependientes parecían porteror y en el 'hall' de la entrada había un modelo sin camiseta. Me llama la atención y le pregunto al de la puerta que si sólo venden ropa o si tenían gente en pelotas dentro, con lo que entedería lo de la cola para entrar. Parece que le hizo gracia y me explicó que era una tienda de alto caché y que los dueños no querían que hubiera mucha gente dentro al mismo tiempo. Hize una foto antes de irme y me dijeron que nos echáramos una foto todos juntos, así que para deleite de l@s que les guste ver tios buenos acabé haciendome una foto con los currantes de la tienda pija ante el asombro de los que esperaban su turno para entrar, si es que parezco uno más de "ellos". Hubo incluso quien me preguntó que quiénes eran, como si fueran famosos o algo así. Seguimos con el concierto, había quedado allí con el taiwanés pero no apareció, así que otra vez a socializarse y acabé con un grupo de... nunca recuerdo si son suizos o suecos, tengo problemas con esos países en inglés, y con el universitario de la noche anterior que estaba por allí. Llovió un poco pero supo rico, porque hacía un calor que te sobraban hasta las pestañas. Se me ha olvidado contaros el calor que hace en New York, da igual si es de día, de noche, esta nublado o brilla el sol, el calor es el mismo, muuuuuucho y además húmedo.

Otra cosa que se me habiá olvidado es que allí no tienes que preocuparte por llevar comida en la mochila, toda la ciudad está inundada de puestos de comida de todo tipo donde por un precio asequible te cocinan algo en el momento, y es que hay tanto movimiento que la gente no tiene tiempo para comer tranquilamente, se compran algo en estos puestos, se lo comen deprisa sentados en alguna plaza y siguen su camino laboral. Como me gusta la cultura española, la hora de la comida es sagrada y la de la siesta también. Que envidia les da eso a los que no son de aquí, y lo digo ahora con conocimiento de causa. Pero hay una cosa que importaría y son los 'shakes' o 'smoothis', batidos de frutas con hielo picado o de frutas con leche y hielo picado, mmmmmmm, te los tomas con pajia y están de buenos... Inciso para comentar que se lleva mucho lo de la pajita aquí, creo que se llaman 'straws', me ha costado aprender esta palabreja, y otra que aún no he aprendido es servilleta, será que no suelo usar ninguna de las dos... Aquí te puedes tomar hasta un batido de helado con leche a través de una pajita.

Esa tarde quería darme un paseo por el Soho pero por causas de fuerza mayor no pudo ser, tras andar un rato después de salir del metro se puso a llover, pero tormenta de verano de Nueva York, son de las que te mojas igual con paragüas que sin él. Me tocó estar refugiado con desconocidos en un portal grande hasta que escampó un poco y salimos corriendo en desbandada no fuera a ser que de camino a donde fuéramos empezara de nuevo. Calado hasta los huesos de vuelta al hostal donde me recontré con Mark, que me explicó que había llegado tarde a nuestra cita, bastante tarde porque yo le esperé algo más de media hora. Salimos a cenar algo más barato que la noche anterior y esa noche yo me fuí a la cama que estaba derrotaíto y con las rodillas haciendo 'pop' (que en inglés es un verbo que se usa para cuando te suenan).

Último día con su última noche. Esta vez nos fuimos Mark y yo a patear el sur de Manhattan, 'financial district' donde está Wall street y su toro correspondiente, 'Battery park' desde donde se ve la estatua de la libertad, muy chiquitita eso sí, y 'Ground zero' que son las ruinas de las torres gemelas donde ahora están construyendo un monumento, un museo, y varios edificios más, uno de ellos va a ser más alto todavía que las que ya no están. Y por la tarde al 'Gay parade' de New York, que nos costó un poco encontrarlo porque las autoridades nos decían que no había tal fiesta, no son muy amigos de lo homo parece ser. Yo me esperaba una fiesta grande con su desparrame, musicota y demás pero no consistía más que en un desfile y la gente mirando, un poco soso, pregunté pero me dijeron que al acabar el desfile tampoco había fiestón, así que estuvimos un rato nos fuimos, que yo tenía ya las rodillas como las de mi abuelo, hay que ver la lata que me dieron. Destacable es que el 'korean guy' quería hacer fotos de las tías que estaban en bikini tomando el sol en Battery Park y que en la fiesta del orgullo estaba preocupado por si algún tío intentaba hacerle algo, culturas diferentes supongo.

Tras una merecida siesta llega la noche y la fatal oscuridad. Salimos a comer algo y el amigo Mark me acompaña al centro a coger el autobús que me llevará al aeropuerto, me alegré de haber cogido ese billete directo a la terminal porque unas chicas del hostal me dijero que tuviera cuidado cuando no hay luz en los alrededores de Newark. Sí señores, esa noche no estuve en el hostal, la pasé en el aeropuerto. Mi vuelo salía a las 6 am y la mejor opción era pasar la velada dormitando por allí. Otro amigo por un rato mientras cenaba y a buscar un sitio tranquilo donde descansar, pero entre la gente y las máquinas de la limipieza no lo encontré.

Vuelta a volar, aeropuertos... el rollo de siempre. Como curiosidad os contaré que en Minnesota es llamado el estado de los 10.000 lagos y es que cuando vuelas por encima si los cuentas casi casi llegan a esa cifra. Y que gran parte del centro de USA está dedicado al cultivo, te puedes aburrir mirando por la ventanilla del avión viendo pasar campos y campos.

La visita fué corta pero intensa, me hubiera gustado pasar un par de días más por allí pero cuando compré los billetes de avión no sabía yo que se conocía tanta gente viajando solo y como no quería aburrirme mucho... De todo se aprende.

Bueno muchach@s como compensación por la demora vamos a hacer un pequeño concurso, a las 11 primeras personas humanas que me manden su dirección les llegará una postal de Nueva York con matasellos de California, y además dedicada. No todo el mundo puede decir que tiene una. Sólo podrán recibirla los que hayan leido todo el tostón o los que hayan pasado directamente al final como en los libros.

Sin más dilación despedirme no sin antes resaltar que allí he conocido el trabajo que quiero para cuando sea mayor y la casa de mis sueños. Lo primero os lo enseño en un vídeo y mezcla música, naturaleza y amigos... Y la última os la enseño en la siguiente entrega. Besos y abrazos para tod@s.




P.D.: hay una foto dedicada para Dani "ruedines". Es lo equiparable al "mountain" pero en esquí y por ciudad.